Everly surgió de las sombras de la desgracia y el rechazo, no sólo sobreviviendo, sino prosperando. Ha forjado un imperio a partir de los despreciados y los olvidados. Everly, desechada por su propia manada, se enfrentó a un camino que debería haberla llevado a la ruina. Sin embargo, ante la traición y la adversidad, no se quebró, sino que se forjó a sí misma en algo poderoso.

Pero el pasado no se olvida fácilmente.

El Alfa Valen, un hombre atormentado por el arrepentimiento, reaparece en busca de redención. Encuentra a una mujer intacta, sin reclamar y sin igual. Valen lucha por el amor y la aceptación en el mundo de Everly, donde la fuerza nace de la traición y el poder surge de las cenizas del desamor.

La batalla de Everly es doble: una lucha pública por la dignidad de los pícaros y una guerra privada contra la atracción magnética de un vínculo de pareja que ni quiere ni confía. Valen pensó que podría reclamarla, pero se encontró con una realidad en la que la mujer que tenía delante no era para reclamarla, sino para respetarla, una fuerza que no debía contener, sino con la que debía contar.